domingo, 8 de diciembre de 2013

Mis pequeños grandes amigos

En esta ocasión hablaré de mis dos bebés, no se debe pensar mal, ya que no tengo hijos aún, pero tengo dos mascotas a las que trato como si lo fueran. Mi perro mayor se llama Bandido que tiene ocho años de edad y otro mi consentido que se llama Marshmallow,  que tiene tres años de edad. Como lo había dicho en mi entrada anterior, mis mascotas favoritas son los perros, porque a mi mamá le gustan estos animales ya que son muy buenos guardianes. La presencia de los dos en nuestra casa, nos produce alegría y enojos a la vez. Aunque el perro adulto es más obediente que el pequeño, los dos hacen muchas travesuras. Cada uno de ellos, se ha ganado mi corazón, en especial mi pequeño juguetón, a quien cariñosamente llamo Marsh, porque su nombre es muy largo. Mis dos mascotas me dan cariño y fidelidad sin esperar nada a cambio. Como se dice, el único amigo fiel aparte de Jesús, son los perros, porque a pesar de que muchas veces los tratamos mal sin querer, ellos siempre están a nuestro lado y se comportan aún más amorosos que antes. El ser humano, por el contrario, no tolera un desprecio, porque acude rápidamente a los golpes o a estar enojado por un largo período con la persona que lo ofendió o lo despreció, aunque el haya sido el culpable. Considero que deberíamos de seguir las actitudes positivas de los animales, porque son ejemplo para nosotros la mayoría de veces. A continuación les hablaré cómo llegaron a casa mis dos perros, a pesar que a mi papá no le agradan éstos animales.

Empezaré por Bandido, el perro adulto, quien llegó a nuestra casa por medio de mi hermano cuando tenía un año de edad, que al inicio me provocó miedo, por su apariencia, él es de raza Chao Chao pero, no es muy peludo. La historia de Bandi, es muy triste, porque sus antiguos dueños, se vieron obligados a dejarlo abandonado. Los anteriores dueños de Bandido, asistían a la iglesia que pastoreaba mi hermano, hace algunos años ya, al parecer a éste perro lo compraron en una veterinaria muy pequeño, pero por falta de espacio en su casa, lo mantenían encadenado durante todo el día y lo soltaban únicamente en las noches, pero eso sí, lo alimentaban muy bien. Lastimosamente, cuando el perro tenía un año de edad, sus dueños se tuvieron que marchar de su casa en la capital hacia Quiché de manera imprevista, porque los estaban extorsionando. Toda la familia  se marchó pero, no se llevaron a Bandido por falta de espacio en el vehículo donde se trasladaron hacia Quiché. Por lo tanto, le encomendaron a mi hermano, que fuera a su casa a ver a Bandi, porque lo dejaron encadenado y ya había pasado algunos días desde que se marcharon de casa. Mi hermano, me cuenta que llegó a soltar al perro, quien cuando lo vio entrar lo aruñó fuerte, porque estaba ansioso que lo soltaran y estaba hambriento. Después de eso, los dueños de Bandi, llamaron de nuevo a mi hermano, para decirle que si le podía buscar una familia quien quisiera adoptar al perro, porque ellos ya no podían regresar por él. En mi casa, hacía 22 días que mi perro Cirpo, se había muerto y estábamos en busca de una nueva mascota que reemplazara la ausencia de nuestra anterior mascota. Así, que mi hermano pensó traerlo a nuestra casa el primero de Mayo del 2006, con el único detalle, que nunca le había preguntado a los dueños de Bandido, cuál era el nombre del perro.

El día que mi hermano lo llevó, Bandido realizó su primera gran travesura pero, admito que a mí no me agradó el perro al inicio. Cuando mi hermano juntamente con mi sobrino lo bajaron del carro, no me gusto para nada su aspecto, daba apariencia de ser malo, por lo que no me acerque a él. Mi mamá por otro lado le agradó y no le causaba temor. Nosotros pensamos hacer que se acostumbrara a vivir en la terraza, así que decidimos hacer que subiera al segundo nivel de la casa, porque mi hermano no lo llevó encadenado. Nos costó un poco hacer que el subiera, pero al fin lo logramos, pero no sabíamos que él, no le tiene miedo a las alturas, por lo tanto, cuando entro a los cuartos lo primero que hizo, fue subirse al balcón, con intención de aventarse hacia abajo. El mayor problema, es que no sabíamos cuál era el nombre del perro, según mi hermano se llamaba Oso, pero nos cansamos de decirle “Oso bájese de ahí”, ya que nunca nos obedeció, temíamos que se aventara y se lastimara en su primer día en su nuevo hogar. Luego de un gran rato, el perro accedió a bajarse de ahí, como si nada hubiese pasado, nos miró y corrió hacia el primer nivel. Después le dimos comida, bebió agua y se durmió por un largo tiempo como si su nueva casa le hubiese gustado. En la noche mi hermano, nos llamó para decirnos que el nombre del perro era Bandido, que comía y bebía agua dos veces al día; y que decía sus antiguos dueños que nos lo encargaban mucho, porque ellos se lamentaban no habérselo llevado. Actualmente, mi  mamá quiere mucho a este perro, es su favorito. Gracias a Dios mi papá no se opuso a que Bandi se quedara con nosotros.

Por otro lado, Marshmallow,  vino a mi casa también gracias a mi hermano. Todo surgió, cuando mi hermano,  puso a jugar a su perrita Chispa, una cocker spaniel con un perro de su misma raza. El día que mi hermano, me contó que su perrita tendría cachorros, enseguida le pedí uno, como regalo de navidad de su parte, porque según, la perrita tendría los perros en diciembre del 2010. Le conté a mi mamá que yo quería un cachorro de los que tendría Chispa y que mi hermano estaba de acuerdo en regalarme uno. Mi mamá lo único que me dijo que el requisito era, que fuese macho, porque a ella no le gustan las perritas y además ya teníamos a Bandido, un perro macho. Sin embargo, mi papá se opuso a la idea, porque siempre que pido una mascota, me dice que la condición es que yo me haga totalmente responsable de ella, como limpiar sus excrementos y alimentarlo pero, nunca he cumplido. La opinión de mi papá no la tome en cuenta, porque estaba emocionada de tener un cachorrito a mi cargo. Afortunadamente Chispa, tuvo un perrito macho, en medio de ocho perritas y no nacieron en diciembre, sino el 21 de octubre del 2010. El día que lo trajeron a casa, lo escondí durante toda la tarde de mi papá, ya que Marsh, se durmió como 4 horas seguidas porque me lo trajeron el 11 de noviembre, es decir, no tenía ni un mes haber nacido. Desafortunadamente, cuando se despertó comenzó a llorar, porque era de noche y le hacía falta su mamá; evidentemente mi papá lo escuchó y por supuesto me regaño, por haber aceptado que me lo dieran. Pero, no me importó, desde que vino a casa Marshmallow, ha sido mi preferido, porque lo tuve desde bebé. Yo le enseñé morder algunas cosas, porque daba temor que se tragara su colmillo y se muriera. Por cierto, se me olvidaba mencionar que Bandido lo aceptó desde el inicio. Junto con mi bebé, como yo le digo cariñosamente he pasado muchas aventuras y desde pequeño le enseñé a jugar fútbol. Ahora, no puede ver un balón sin que él,  la muerda y destruya fácilmente. Aunque ahora ya está grande, sigue teniendo un espíritu de cachorro, pero no me gusta que siga creciendo, porque sé que después ya no les gusta jugar, ni les gusta que uno los moleste. Un claro ejemplo de que los años transcurren es Bandido, porque él ya no le gusta jugar y se enoja cuando lo molestan.

Aunque los dos son muy encantadores, Marshmallow, siempre está a mi lado, cuando estoy haciendo tareas, esta acostado a mi lado, si me levanto se va conmigo. Si voy a la cocina, me acompaña, si tengo miedo de ir al segundo nivel, cuando está oscuro, se va conmigo, se pone a llorar cuando no estoy en casa. Dice mi mamá que le hago falta cuando pasó varios días en casa de mi hermano, ya que con ella no es tan apegado. Obedece todas mis órdenes y está atento cuando llego a casa, se me tira encima y me da un cálido recibimiento. Admito que en ocasiones cuando no estoy de buen humor, llego a casa y cuando el se me tira encima muchas veces lo he lastimado cruelmente con patadas, pero rápidamente le pido disculpas y lo acaricio, porque él hasta se comporta más cariñosamente conmigo. Mi gordo, como le digo a Bandido, lo quiero también pero él a veces me ha querido morder, por lo tanto no lo acaricio mucho, además Marshmallow se pone celoso, que acaricie a Bandido. En general, mis perritos son mis amigos que nunca me abandonan, los cuales llevó en el corazón y no comprendo, porque muchas personas tratan mal a estas mascotas que son tan increíbles.




lunes, 2 de diciembre de 2013

Mis viejos amigos

Desde pequeña estoy acostumbrada a tener mascotas en mi casa. Debo decir, que me encantan los animales, en especial los perros. Cuando era bebé, mis papás tenía una perrita que era demasiado enojada, dicen ellos, que mordía a cualquier persona desconocida que entraba y una ocasión, mordió hasta el lechero. Lastimosamente, cuando nos mudamos de casa, al parecer nuestros nuevos vecinos, le dieron bocado y murió, porque la teníamos en la terraza. Así, que compraron mis padres tres perros, pero dos no se llevaban, se peleaban constantemente.  Uno lo llevaron a la terraza y los otros dos convivían con nosotros abajo. El que vivía arriba se llamaba Muñeco y los otros dos, uno se llamaba Cirpo y Rambo. Yo quería mucho a mis mascotas, pero se me olvidaba decir que a mi papá no le gustan los perros, él se inclina más por los gatos. Por ello, siempre ha estado en contra de que tengamos perros en mi casa y eso hizo que regalara a Rambo, un perrito chiquito de tamaño, peludo y cariñoso. Me recuerdo que el día que lo llegaron a traer las personas que lo adoptarían, lloré demasiado.

Sentí un vacío muy grande en mi corazón, porque Rambo, era el único que obedecía todas mis órdenes, aunque no era un perro de raza, ha él lo quería yo más. Mi mamá por el contrario, estaba muy encariñada con Cirpo, un perro grande, blanco con ojos azules de raza pitbull. Estando en casa era un perro muy educado, porque nos podían venir a visitar y  él no mordía a nadie. Se me ha olvidado mencionar que todos los perros que hemos tenido, ninguno lo hemos mantenido encadenado, porque mi mamá dice que es doloroso para un perro, estar encadenado todo el día. Nosotros contamos con un gran patio, junto con el garaje, para que nuestros perros se paseen, ellos deciden si desean asolearse o estar en la sombra y si toman agua, comen o no. Únicamente los encadenamos, cuando los sacamos a pasear, pero de lo contrario pasan todo el día y la noche sueltos por toda la casa. Mi mamá compró a Cirpo, cuando era muy pequeño, así que toda su vida la había pasado con nosotros. El problema que teníamos con este perrito, es que cuando se salía por accidente, encontraba a otro perro en la calle, lo agarraba del cuello, tratando de matarlo y no existía fuerza humana que hiciera que soltara a su víctima. Y por eso, no dejábamos que Muñeco, bajara de la terraza ni que Cirpo subiera, porque se peleaban y éste último trababa de matar a su compañero.

Dos años después que regalaron a Rambo, Muñeco falleció en una noche muy fía. Fue triste, porque siempre se escuchaba como corría y ladraba en la terraza. No se sabe de qué murió, porque no estaba enfermo, únicamente lo encontramos muerto en medio de las láminas y todo el material que estaba en el suelo en la terraza, ya que estaban construyendo el segundo nivel de la casa. Ahora solo nos quedaba Cirpo, pero éste vivía a bajo con nosotros. Pero, un día mi abuelita dejó que Cirpo se saliera de la casa, por accidente y como era de costumbre encontró una víctima, un pobre perrito callejero a quien éste intento matar. Pero, la diferencia fue, que mientras Cirpo, tenía en su hocico a su nueva víctima, un perro de una vecina, que era más, perro callejero que de casa, le mordió su pata trasera, lo que le provocó una llaga, que se le infectó, porque al parecer,  el perro que lo mordió, tenía una enfermedad bucal. Esto provocó que Cirpo, ya no comiera, ni bebiera nada, se quedó cojo de su patita, y por negligencia de nosotros, que nunca lo llevamos con un veterinario, falleció en abril del 2006, días antes del cumpleaños de mi mamá. Para mi madre, fue algo doloroso, porque era su perro preferido y se sentía un gran vacío dentro de casa. Y así, pasamos alrededor de un mes sin mascota, hasta que llego uno de los perros que tengo actualmente, del que hablaré en una próxima entrada.




martes, 26 de noviembre de 2013

Mi único viaje fuera de Guatemala segunda parte


Hoy retomo lo que redacté hace algunas semanas, mi único viaje fuera de Guatemala segunda parte, después de mi llegada a aquel nuevo país, todo se volvió una maravilla. Primero nos encontramos con mi tío, quien nos condujo hacia su casa. Su casa estaba muy lejos de una colonia, muy conocida, del cual yo recuerdo su nombre. Lastimosamente, ingresamos a la colonia, se había ido la luz. Y así pasamos nuestra primera noche, en un país desconocido y nuevo para mí. Al día siguiente mis papás ordenaron maletas, para tener nuestra primera salida como turistas oficiales. Y el primer lugar que decidimos ir fue un centro acuático llamado Amapulapa.

Este centro acuático, era tan pero tan grande, que mi primo, hijo de mi tío que vive allá perdió un zapato y no lo encontró. Su papá ya mero le pegaba, pero gracias a que nosotros estábamos ahí, no le dijeron nada. Lo bonito de este lugar, era el tamaño gigantesco de cada piscina. Pero como todo país de expertos, las piscinas eran sumamente ondas también y los adultos no pagaban por entrar a dicho lugar. Luego, ese mismo día decidimos ir a otro centro acuático, denominado Flor del Río, un sitio que quedaba muy lejos de Amapulapa y que era sumamente caro, para nuestro punto de vista. Llegamos alrededor de las tres de la tarde y el centro lo cerraban a las cuatro, casi no disfrutamos en ese lugar. Lo que me llamó la atención de ese lugar que era enorme y podía uno pagar para dormir ahí, en hamacas. También había muchas canchas para jugar fútbol y el recuerdo que me traje de dicho lugar, fue un enorme raspón que me di, en un tobogán del cual me lance. Y fue así, como terminó nuestro primer día de vacaciones en aquel país.

Al día siguiente, fuimos a un mercado y a un parque, donde me reí demasiado de mi ignorancia cuando traté de comprar una granizada, porque el vendedor no me entendía que deseaba comprarle. Me di cuenta que aunque El Salvador, sea un país vecino y que hablemos el mismo idioma, decimos muchas palabras muy diferentes. Luego, compramos pizza y nos fuimos a casa alrededor de las dos de la tarde. Cuando mi tío retorno de su trabajo, nos invitó a enseñarnos el puerto llamado El Espino, que queda muy cerca de donde él vive. Y así decidimos ir, aunque no quedaba tan cerca como él dijo. Llegamos alrededor de las cuatro de la tarde, pero mis papás no me dejaron bañarme, porque decían que el mar estaba llenando y el agua podía ser peligrosa. Lo bonito, fue que pude ver el atardecer y probar unos tamales de elote súper deliciosos. Regresamos a casa alrededor de las ocho de la noche. Y así concluyó el día segundo.

En el tercer día, fuimos a unas pozas llamadas Aguas Calientes y posteriormente a otras, pero el nombre de ese otro lugar no lo recuerdo. Nos la pasamos genial, en esas pozas, aunque admito que cuando planearon ir ahí, no me llamo mucho la atención el lugar. Mis padres trataron de darme algunas clases para aprender a nadar, pero era inútil, no aprendía por más que ellos se esforzaran enseñándome. En el cuarto día, únicamente fuimos a algunos restaurantes y conocimos nuevas personas, vecinos de mi tío. Y fue de esta manera, como nuestros cuatro días en nuestro país hermano, terminaron. El día domingo en la madrugada salimos de regreso, para venir un poco temprano. Pero, en el camino hacia la frontera de El Salvador, nos detuvo la policía y claro yo no portaba pasaporte. Gracias a Dios mi mamá argumento que no encontraba mi pasaporte por todas las maletas que traíamos. Y así fue como logramos llegar sin ninguna novedad a la frontera y cruce de la misma manera, como le relate en la primera parte. Alrededor de las dos llegamos aquí a mi casa, quede fascinada con el viaje. Ahora tengo muchas ansias de volver a ir, pero no hemos podido ir de nuevo, al parecer iré el siguiente año, primero Dios vayamos, porque deseo volver a ver a mi tío y primo, por supuesto para conocer más lugares en aquel país.




lunes, 4 de noviembre de 2013

Día de muertos en mi comunidad

Una tradición que es muy antigua en mi comunidad, mejor dicho en toda Guatemala, es la celebración del día de todos los santos difuntos o día de muertos que se celebra  el primero del mes de noviembre, para conmemorar a los familiares ya fallecidos. En mi familia no lo celebramos, pero de todos los años de mi existencia, nunca había puesto especial importancia a esta celebración. Pero, este año,  desde el momento en que mi maestra de Literatura nos designó escribir sobre esta tradición de la cual no sé mayor cosa. Así que me tocó preguntar a mis vecinos sobre la celebración y algunas veces solo observar para ver que realizaban las personas en mi entorno.

Una conocida de mi mamá que es maestra me contó que ésta celebración es muy antigua, ya que en épocas de los antiguos egipcios y babilonios ya se observaban todas estas fiestas, porque ellos así lo veían. En Mesoamérica también hay antecedentes que conmemoraban el día de los muertos con rituales muy especiales, dedicando dichas fiestas al dios Tlaloc, esto en México. Pero que en Guatemala, estas celebraciones son muy preciosas y distintas. Ella me explicaba que ahora en Guatemala, actualmente se celebra también la fiesta de Halloween, fiesta pagana que tiene sus orígenes en la antigua Irlanda, y que se celebra con mucha fuerza en Estados Unidos, también muchas personas la celebran, pero hay  que tener presente que primero tiene que ser lo nuestro. Cuando ella me mencionó esto, me recordé que el hermano menor de unas vecinas murió precisamente esa noche en un bar, celebrando esa noche acompañado de 5 jóvenes más y lo velaron el día de los muertos. Ahora estas señoras están tristes por la muerte de su hermano.

Un vecino me contaba que muchas  personas con un mes de anticipación van a limpiar, pintar las tumbas de sus parientes, otros van a hacer reparaciones, las pintan, y a veces cambian las cruces para cuando llegue el día dos de noviembre estén limpias y bonitas, ya que las mismas son las casas de sus seres queridos que han partido a la otra vida. Mi vecino también me relataba que la celebración uno de noviembre es el día de los santos, es decir, el día de los niños fallecidos, mientras que el día dos es el día de los finados, osea todos los adultos fallecidos.  Esto realmente llamó mi atención, porque según yo, no había ninguna separación entre fallecidos, pero veo que no así, ya que los niños tienen su propio día, separado de los adultos.

El día primero de noviembre aunque no me levanté muy temprano, pude observar que muchas personas  se dirigían a los cementerios a ver a sus parientes fallecidos, sin importar que estén enterrados en el interior del país y todos iban con muchas flores para enflorarlos.  Otras personas, llevan deliciosos platillos como, caldo de gallina, recados, pulique y manjares como ayote, chilacayote y jocotes en dulce que son de la temporada y que hay en abundancia.  Algunos, llevan bebidas alcohólicas y se toman unos tragos con su difunto, del licor que al finado le gustaba en vida. Comen y beben con sus muertos, y ya cuando abandonan por la noche el camposanto algunos ya van bien bolos, pero todos van felices a sus casas ya que han cumplido con sus difuntos.

Una vecina, amiga de mi abuelita me contaba que según la tradición, las oraciones y rezos que se hacen es para que los muertos que no han conseguido desprenderse de esta vida y andan en pena, se logren ir al fin a descansar en paz, durante ese día. Otros piensan, que las creencias refieren que éste es el único día que los muertos tienen el permiso para visitar las casas de sus parientes y donde ellos mismos vivieron, ya que si no, no lo pueden hacer en otro tiempo, y que por ese motivo sé que se hacen todos estos preparativos.

En algunas  lugares de mi comunidad hasta en los caminos abundan las flores de muerto, para adornar las tumbas de los difuntos. Otros más vivos van a comerse las comidas que las personas les dejan a sus muertos, cuando algunos ven que la misma ha desaparecido dicen que a su difunto le gusto ya que hasta el plato se llevó. Otro platillo muy típico de la temporada es e l delicioso fiambre, que se elabora con mucha dedicación en muchos hogares guatemaltecos. Como toda curiosa tenía la intriga de saber cómo se originó el fiambre.  Por ello, consulté señora de mi comunidad que todos los años vende fiambre, para ver si me podía ayudar. Ella no se negó, y me contó la historia mientras realizaba este delicioso platillo. Me dijo: La tradición cuenta que el origen de ésta exquisitez nació cuando en la antigua capital del Reino de Guatemala, Santiago de los Caballeros, corrió la noticia que venían del Obispado de Ciudad Real, Chiapas, México, el Obispo con una comitiva de autoridades de dicho lugar, y las monjas que estaban a cargo de todo el protocolo en la antigua capital del Reino no tenían nada preparado, de pronto a alguien se le ocurrió juntar todo lo que en su casa había y luego de mezclar todos los condimentos hicieron un platillo tan sabroso que cuando lo sirvieron a sus comensales todos estuvieron de acuerdo que era una delicia,  cuentan  que hasta la receta pidieron para llevarse y ponerla en práctica en aquellas lejanas tierras. Yo quedé asombrada.

Es por eso que el fiambre ya en nuestros días se prepara y se degusta desde el 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre. Algunos lo llevan al cementerio para degustarlo junto a sus difuntos.  Por cierto, el fiambre le quedó delicioso a la señora. Agradezco grandemente a todos los que no se negaron a brindarme información sobre ésta tradición. Y me alegro que aún existan ciudadanos que mantengan vivas las tradiciones de nuestro bello país.


lunes, 28 de octubre de 2013

Mi único viaje fuera de Guatemala, primera parte

Hace tres años con siete meses que viajé al Salvador, algo que fue sumamente emocionante. Viajamos en automóvil, con mis padres, una tía y un primo, durante la semana santa en el mes de marzo del 2010. Desde el momento que se planeó el viaje, yo estaba ansiosa por ir a conocer este país vecino, ya que iba a ver a mi tío, el único medio hermano de mi mamá que vive allá. Lo malo del viaje, era que no nos íbamos a llevar a mi abuelita materna, y la dejaríamos 5 días sola en mi casa.Mi tía y mi primo viven en Quetzaltenango y vinieron a la capital día antes del viaje para preparar todo lo que llevaríamos para el viaje tan largo que tendríamos. Mis nervios por viajar a un país al cual tenía años de pedir que me llevaran era cada vez más emocionante y fue así que llegó el tan anhelado día. Me levantaron temprano para que terminará de arreglar mi maleta.


El momento de salir de casa llegó, aparentemente íbamos a salir temprano, pero al final salimos a las 9:30 a.m. con rumbo a la frontera. Llegamos a la frontera de “Las Chinamas” que está en el departamento de Santa Rosa, alrededor de la 1:00 p.m. donde es un gran puente, él que divide Guatemala y El Salvador. Todo marchaba bien, hasta el momento, del registro para que nos dejaran ingresar a éste país. Fue entonces, cuando todo se complicó, porque a mis padres, mi primo y mi tía no tuvieron ningún problema para que los dejaran pasar, la difícil fue conmigo, ya que yo no llevaba pasaporte siendo menor de edad, entonces no me dejaron pasar. Yo me enojé tanto, porque según mis padres dejaban pasar a los menores  de edad cuando van acompañados de sus dos papás y presentan la fe de edad del mismo. Todos estos papeles mis papás los presentaron, pero el feo señor que daba la última señal para que nos  permitieran pasar se negó rotundamente a dejarme pasar; y nos dijo que nos fuéramos  sino llamaría la policía. Me puse a llorar porque este viaje lo espere durante años, y cuando se hizo realidad un señor desconocido lo estaba arruinando.


Mis padres, no se dieron por vencidos, a pesar que el señor de inmigración dijera que si yo no tenía pasaporte no me iban a dejar pasar por ninguna otra frontera. Así que mis papás le dijeron a mi primo y mi tía que nos fuéramos a Jutiapa a la frontera “San Cristobal”, ya que allí no había puente y menos vigilada por las autoridades de inmigración  Además no dejaríamos que el viaje lo echaran a perder tan fácil. Así que viajamos por unas horas más en el calor, cabe resaltar que no me gusta el calor. Llegamos como a las 3:00 p.m., pero ahí no hay policías, por lo tanto pase a pie, me hice pasar como una vendedora, y pasé rápidamente al otro lado a esconderme mientras mis papas pasaban. Todo salió con éxito gracias a Dios; porque no me atraparon, pero estaba demasiado nerviosa porque sentía que en cualquier momento llegaba alguien y me descubriría.



domingo, 20 de octubre de 2013

La vigilia de jóvenes

Todos los meses en la iglesia que asisto, el último sábado de cada mes se realiza una vigilia de las nueve de la noche a las doce de la mañana. En el mes de julio nos designaron a los jóvenes dicha vigilia. Así, que decidimos realizar algo diferente, para motivar a los jóvenes para que asistieran a la actividad. No teníamos idea de que realizar, pero los directivos nos reunimos para saber qué haríamos. Yo propuse que presentáramos un drama a la iglesia, entre todos jóvenes, la idea les pareció fantástica. El único problema, es que no sabíamos que dramatización presentar. También, se realizó el programa, donde las alabanzas, las interpretaría el grupo de la iglesia. A nuestro presidente se le ocurrió, que alguno de los cinco que integramos la directiva de jóvenes, tendría que buscar una bonita reflexión y presentarla ante toda iglesia, en un período máximo de quince minutos. Pero, nadie quería buscarla, y mucho menos presentarla ante tanta gente que asistiría esa noche. Después de estar decidiendo quien la presentaría, me designaron a mí, lo cual, me causaba muchos nervios, porque soy una persona algo tímida.

Todo lo que realizaríamos ya estaba planeado, pero no teníamos aún el drama, ni la persona designada que presentaría la reflexión. Así que le pedimos ayuda a un joven mayor a todos los directivos que nos ayudara a buscar y a organizar un buen drama con los jóvenes que desearan participar. Él accedió sin ningún inconveniente, pero como es de saberlo, controlar un grupo de jóvenes es más difícil que un grupo de niños. Porque los jóvenes responden con palabras hirientes cuando se les regaña, mientras que un niño no. Pero, gracias a Dios, el día que nos convocaron para organizar el drama, los jóvenes se comportaron muy bien. Y así empezaron los ensayos, después de establecer el drama. Al inicio de los ensayos, todos nos reíamos y nos daba pena cuando no podíamos hacer correctamente el papel que se nos había designado. Además, como buenos  guatemaltecos, que todo lo dejan para última hora, ya contábamos con unos cuantos días para ensayar nada más.  Con el esfuerzo e interés que cada participante aporto en cada ensayo, logramos organizarnos bien, aunque el último ensayo, lo hicimos un par de horas antes de la presentación.

El ensayo, ya se había realizado y mi reflexión ya estaba lista. La reflexión que busqué era sobre el perdón. Todo estaba listo, solo esperábamos que llegara la hora, yo estaba sumamente nerviosa. En el drama, saldría como endemoniada, cosa que me causaba pena y en esos momentos, sentía que la reflexión que daría se me había olvidado por completo. Todos mis amigos me decían que me tranquilizara, ya que me veían muy nerviosa porque iba a hablar durante un largo período de tiempo ante muchas personas. Además la reflexión, la haría antes que presentáramos el drama. También debía bajar rápidamente del púlpito de la iglesia e ir a cambiarme para la dramatización. Precisamente en esos momentos ya eran las nueve y media de la noche; y la reflexión la daría a las diez y diez. Mis nervios en ese momento incrementaron. Pero, fue entonces cuando ocurrió lo que nadie se imaginó. Se fue la luz.

Todos en la iglesia pensamos, que la luz regresaría rápido, pero no fue así. El reloj marcó las diez en punto, y la luz, aún no regresaba. El momento que me tocaba pasar se acercaba, pero mis nervios disminuyeron, porque ahora sin luz, ya no vería directamente a todas las personas, ni ellas a mí; solo escucharían mi voz. Me sentí tan feliz en ese momento, porque para mí, estar sin luz era algo hermoso. Aunque otros estuvieran en desacuerdo conmigo. Llego el momento, cuando mencionaron mi nombre y debía pasar. Subí al púlpito,  me sentí tan relajada y confiada que hable más de lo que debía, porque me alegre que todas las personas estaban en completo silencio escuchándome. Luego, baje aliviada y corrí rápidamente a los baños a cambiarme para la dramatización a oscuras.

Todo a nuestro alrededor estaba oscuro, lo único que nos alumbraban eran algunas candelas que unos hermanos de la iglesia fueron a comprar. Para mí, era muy gracioso dramatizar a oscuras. Aunque estar sin luz, fue lo más emocionante de la presentación, lastimosamente a eso de las doce menos cuarto, cuando ya estábamos a punto de terminar el drama, regresó la luz. Me encantó esta experiencia de presentar sin luz, deseo que se repita. Quiero que aunque haya luz en el próximo drama que presentemos, se apaguen las luces, porque me di cuenta que las personas prestan mucho más atención en situaciones así. Además, uno como presentador no se da cuenta si las personas se duermen, porque la dramatización es demasiado aburrida. También, agradezco a Dios porque todo nos salió muy bien, y a cada joven que no se negó a participar. Ahora nos damos cuenta que con la ayuda y colaboración de la mayoría las actividades son todo un éxito.

Lamentablemente, no tengo fotos de esta actividad, porque como mencioné, se fue la luz en ese momento. Pero, aquí un pequeño collage de los que participaron en la dramatización.



domingo, 13 de octubre de 2013

El video que me hizo reflexionar

Muchas veces, la mayoría de personas pasamos más de algún mal momento, sea de enojo o tristeza a diario. Pero, lo más triste es que la causa de la mayor parte de veces de nuestros enojos o tristezas son nuestros amigos, con sus actitudes. Para mí, la amistad es algo sumamente valioso. Un momento, de tristeza me sucedió el día de ayer, sábado. Como todos los sábados, yo me dirijo a la iglesia que asisto, a eso de las siete y media de la noche y regreso a las nueve, regularmente. Todo marchaba bien, como es costumbre, pero mi estado de ánimo era de total felicidad, lo cual, me daba la pauta que algo malo me sucedería, ya que durante todo el servicio me la pase riendo exageradamente. Como me decía mi abuelita y mi mamá siempre cuando era pequeña: “Deja de reírte tanto, que después vas a parar llorando”,  frase que llevo presente conmigo cada vez que me río mucho.

El servicio iba a la mitad, cuando entro, un amigo mío, pero estaba muy indiferente conmigo; sentí que me dio la mano únicamente por obligación, ya que yo siempre me encuentro en la entrada de la iglesia. Yo no sabía que le sucedía, puesto que había estado hablando con él, la noche anterior, durante un largo tiempo, pero yo no le había hecho ningún daño. Luego, que entró, me puse a pensar, en lo que había pasado entre él y mi mejor amiga, ya que ellos habían sido novios. Pero, lastimosamente ella se hizo novia de otro chico, siendo aún novia de él, cosa de la que él, no sabía. Les contaré brevemente lo que sucedió, para que puedan entender lo que me pasó, por el simple hecho de ser una persona sincera.

Un día, él me preguntó que porque mi amiga, estaba tan diferente con él, cosa que yo medio sabia, ya que mi amiga no me había mencionado nada de su otro amorío. Yo me había enterado por medio de Facebook, ya que ella tenía dos cuentas, una donde era novia de mi amigo y otra donde exponía su nuevo romance. Al parecer ella lo negaba, ya que decía que con el otro chico solo eran amigos. Pero un día, como dicen, “la curiosidad mató al gato”, revisé mi twitter, y fue donde sin querer, me di cuenta, que mi amiga era novia también del otro chico desconocido, puesto que no lo conozco. Así que, decidí contarle la verdad a mi amigo, “el engañado”, ya que él me contó, que ella no le decía nada, ni siquiera le hablaba cuando llegaba a visitarla a su casa, cosa que le causaba mucho dolor e incluso no podía dormir.

Mi amigo al inicio no me creyó, porque el confiaba mucho en su novia, así que decidió hablar con ella a su casa. Pero, ella no quería hablar con él, por lo que lo evadía. Le habló, hasta que su mamá la obligó, ya que él ya estaba llorando, en busca de una explicación de su silencio. Todo quedo aclarado hasta que ella le dijo que ya no quería nada con él, ya que su papá que se encuentra en Estados Unidos, la regañaba; cosa que me causo mucha risa, cuando mi amigo me contó, ya que era una evidente escusa de mi amiga. Después de tanto, pelear terminaron definitivamente, ya que ella le dijo que realmente no quería nada con él, al principio fue muy doloroso para él, ya que la ama, pero se dio cuenta que realmente no valía la pena. Se convenció que ella tiene otro novio, desde antes que terminaran, cuando decidí enseñarle el Facebook y twitter por medio de mi celular, cosa que lo dejó muy pensativo y sentido.

Desde ese día, que mi amiga me vio hablando con su ex, ya no me habla; me bloqueó de uno de sus cuentas de Facebook, no me da la cara, me evade y está enojada conmigo. Por fortuna, ella jamás me contó de su romance con su nuevo novio  que no conozco, si no estaría aún más molesta conmigo. Precisamente ayer, ella llego a la iglesia, paso a la par mía y me ignoro. Y luego, entra el ex de ella, y casi me ignora, al parecer porque, ella lo está convenciendo a él, que todo lo que yo le dije eran mentiras. Cuando terminó, el servicio salí yo dispuesta a aclarar las cosas con mi amigo, pero salió rápidamente a su casa y no me dijo adiós, ya que paso al lado mío.

Entonces, decidí quedarme un rato, con mi mejor amigo, tratando de olvidar lo sucedido, tratando de hablar con el resto de mis amigos que aún no se iban de la iglesia. Todos me ignoraron, cuando me acercaba a hablarles, me ignoraron e incluso una chica se enojó conmigo, porque yo la seguí, cuando estaba junto con su amiga, para hablar con ellas. Traté de hacer como si nada pasaba, pero no pude evitar enojarme, cuando vi a mi amiga “la infiel” llorando puras lágrimas de cocodrilo, al lado de su mamá, haciéndose la víctima, que ella nunca había engañado a su ex novio. Su mamá, estaba molesta por lo que le hizo a su ex, ya que ella lo quiere como a un hijo. Pero, por haber sido sincera, perdí a mi mejor amiga desde hace 3 años y medio,  y a un amigo, porque ella, lo puso en mi contra.  

Así, que decidí regresar a casa lo más pronto posible, ya que la mayoría de mujeres somos muy sentimentales, y lloramos fácilmente. Vine a mi casa, y decidí seguir con mis tareas, cuando recibí un mensaje de parte de mi amigo Luis, sobre lo sucedido el viernes en el colegio, de lo cual, yo no había puesto mayor importancia. Lo que me dijo, me hizo sentirme aún más triste. Luego, publiqué algo muy triste en mi biografía de Facebook, cosa que es muy extraña de mi parte. Yo casi no acostumbro, escribir mis estados de ánimo por las redes sociales, pero ayer me sentía tan mal, que decidí publicar lo que estaba sintiendo. Recibí algunos comentarios donde me animaban, pero el que me ayudó mucho, para sentirme mejor, fue un video que me compartió Lyli. El cual, sin querer ella había compartido conmigo, minutos antes que yo publicara mi estado, por lo tanto no lo había visto, pero cuando ella vio mi publicación me obligó a verlo. Lo abrí incrédula de lo que podría decir, pero al final, me dejo impactada, y no podía dejar de llorar por lo que decía. Me hizo reflexionar mucho.

No es cosa fácil, perder un amigo,  ya que, no se encuentran de la nada, hoy en día, cuesta encontrar a los verdaderos amigos. Todos mis “amigos” me hicieron sentir como cualquier cosa, que no tiene sentimientos y que no hay que ponerle importancia. Únicamente dos de mis amigos no me ignoraron ese día, Dios  y mi mejor amigo terrenal. Sé que la felicidad de cada persona, no depende de otras personas, pero duele mucho, cuando personas que realmente queremos, nos hacen de menos. Yo en lo personal, tengo esa mala suerte, de que las personas con las que me encariño fácilmente me dan la espalda, cuando yo los necesito, porque me encontraba triste por la actitud de mi amigo y la pérdida de mi mejor amiga. Gracias a Dios mi familia no me ha dado la espalda y me aprecian por el momento. Por eso, he decido; no decir nada de lo que veo tan rápido, porque los efectos son malos como la perdida de amigos. Aunque dentro de mí, no me arrepiento de lo que hice.

Esta experiencia, me ha enseñado a expresar lo que realmente siento en el momento, y darme cuenta que hay muchas personas que me aprecian, puesto que muchas veces oculto mis tristezas, detrás de una sonrisa fingida. Pero, aprendí que lo más doloroso, más que perder un amigo,  es no saber en realidad lo que uno vale como persona, el valor real de una mujer, cosa que me hizo ver este video.

Aquí les dejo el video, espero que muchas mujeres lo puedan ver y se den cuenta del verdadero valor que tienen por el simple hecho de existir. 


lunes, 7 de octubre de 2013

El viaje esperado

La iglesia evangélica a la cual asisto, cada año realiza un viaje en el mes de agosto juntamente con las demás iglesias de su misma denominación, conmemorando el día del embajador o de la juventud.  Este año, el viaje se llevaría a cabo en Aqua Park, el 15 de Agosto, para aprovechar el feriado capitalino, de la Virgen de la Asunción para que pudieran asistir todos los jóvenes. Gracias a Dios, yo estaba de vacaciones para dicha fecha. Yo soy secretaria actual de la sociedad de jóvenes de la iglesia, así que junto con el resto de la directiva teníamos que planear el viaje. Antes que nos notificaran oficialmente donde se llevaría a cabo, este año la actividad yo estaba muy emocionada por ir, pero nos informó, la directiva central, el lugar que habían decidido llevarnos mis ansías por ir disminuyeron. Yo esperaba, que fuese otro lugar más lejano, ya que me encanta viajar, y me gusta que los trayectos sean largos ya que me gusta ir viendo todo lo que hay en el camino. Pero, las ganas de salir de mi casa de paseo con mis amigos tuvieron mayor relevancia. Así, que esperaba la llegada de esa fecha con mucha emoción.  


Este viaje, lo pagaría nuestra directiva, como regalo y ayuda especial, a todos los jóvenes. Los que saldrían más beneficiados serían los jóvenes que aún no trabajan y dependen aun de sus padres, para que todos pudieran ir. Pero, ¿Cómo reuniríamos el dinero para dicho viaje?, fue la primer pregunta que nos vino a la cabeza, a los 5 organizadores locales; sí, en realidad no teníamos los fondos necesarios para financiar el viaje. Entonces, fue cuando vino a nuestra mente realizar diversas actividades para recaudar fondos, con la ayuda de los mismos jóvenes que deseaban ir al viaje, con dos meses de anticipación. Decidimos, realizar cada quince días, los sábados venta de tamales en nuestra colonia. Para ello, le pagamos a una hermana de la iglesia, para que nos hiciera los tamales el sábado en la mañana y en la tarde, la mayoría de jóvenes nos reuníamos para ir a vender de casa en casa, nuestros deliciosos tamales. Cuando vendimos por primera vez, sentíamos vergüenza, porque ninguno estaba acostumbrado a vender ambulantemente, pero lo logramos. Luego, decidimos hacer un día domingo, la venta de almuerzos, en una esquina cerca de la iglesia. Vendimos gracias a Dios, muchos almuerzos, lo recaudado fue lo que ayudo a pagar la mayoría de los gastos para el viaje, ya que fue la actividad donde más ganancias obtuvimos. Gracias a la colaboración de todos,  la venta fue un éxito.

Después lo difícil fue, la búsqueda de un bus, que nos transportara hasta dicho lugar, a un precio favorable. El lugar no está muy lejos, pero cabe mencionar que el precio de los combustibles es elevado. Encontramos al fin, el bus indicado. Y para compartir gastos, decidimos compartir el bus, con otra iglesia que también asistiría al viaje,  está cerca de nuestra iglesia. Además todos los jóvenes de la iglesia, no asistirían al viaje, por lo tanto no llenaríamos el bus. Lo alegre, fue que se anotaron casi todos los jóvenes de la iglesia, para ir al viaje. Los que nunca habían ido, en esta oportunidad irían porque no tenían que pagar nada de pasaje, solo se preocuparían por la comida, pero al final de cuentas, es lo de menos. En este paseo, solo asisten jóvenes, por lo tanto, teníamos que llevar a una persona adulta a cargo de nosotros, así que decidimos llevarnos a nuestro pastor. Por fortuna, ningún otro adulto, deseo irse con nosotros. Organizamos los asientos del bus, lastimosamente, a algunos les tocaría irse en cada sillón tres personas. Todos los jóvenes ya nos habían confirmado que asistirían, aún aquellos, que sus papas nunca les habían dado permiso. Todo estaba listo, solo faltaba una noche para que el esperado viaje se llevara a cabo, la mayoría estábamos nerviosos.

El día esperado llegó, todos madrugaron, ya que se les advirtió que quién no estuviera puntualmente a la hora indicada, se quedaría, ya que no esperaríamos a nadie. Y como es costumbre, cuando es cosa de viajes, todos madrugan. Llegó el bus, nos subimos, todo marchaba bien, hasta que subí al bus, porque no me sentaron junto con mi  mejor amiga, como me habían dicho. Sino, al contrario, me tocó irme sentada en la orilla del sillón con dos jóvenes más. Por cierto, casi me caía en las vueltas, porque los jovencitos no me dejaron mucho espacio, y no me ofrecieron sacar el sillón. Por ello, me enoje tanto, que me fui todo el camino sin hablar. Creo que a nadie le importó, porque el bus tenía televisión, entonces iban viendo la película de los pitufos. Yo del enojo que sentía decidí, escuchar música, pero hubo tan solo un amigo, que notó que yo iba enojada, así que me trato de animar, haciéndome reír. Eso no lo olvidaré, porque él me demostró que realmente, me considera su amiga y se preocupó por mí. Mientras nos acercábamos al lugar, reflexioné y me di cuenta que no valía la pena amargarme el día que tanto había estado esperando.

Al fin llegamos, fue muy largo el camino para mí, ya sabrán por qué. Entramos, y buscamos con mis amigos un lugar para sentarnos, pero no encontrábamos, rodeamos casi todo el turicentro, en busca de un lugar grande donde nos sentáramos todos juntos. Después de tanto buscar lo encontramos, desayunamos y asistimos al devocional, juntamente con los jóvenes de las otras iglesias que habían llegado. La predicación, que dio el joven encargado del devocional, fue estupenda, al igual que la actividad que realizó. Regresamos al lugar donde se encontraban nuestras cosas, nos cambiamos para comenzarnos a bañar, luego, nos tiramos como locos, en la primera piscina que vimos. Todo el día fue de molestadera, de competencias en el agua, de charlas y de sesiones de fotos en las diferentes piscinas. Fuimos a dar una expedición a un río que pasa en medio del turicentro, después que almorzamos. Como a eso de las tres de la tarde empezó a llover, lo cual hizo más divertido el día. Nos bañamos todos en una pequeña piscina cerca de nuestra cabaña donde teníamos nuestras cosas. Los chicos, decidieron hacer competencias deportivas, que estuvieron muy divertidas con las que se terminó nuestro día de  aventura.

Llegó la hora de regresar, nadie quería salirse de las piscinas, pero debíamos regresar. Nos cambiamos y abordamos nuevamente el bus, de regreso a casa, afortunadamente, los jóvenes con los que venía compartiendo el sillón, se compadecieron de mí y de regreso me dejaron venirme en el fondo del sillón, al lado de la ventana, ya que no deseaba venirme nuevamente en la orilla. Regresamos temprano a nuestras casas muy cansados, pero alegres, lastimosamente me enferme después de gripe, debido a que nos estuvimos bañando bajo la lluvia. De los dos viajes, que he asistido con los jóvenes, tengo que decirle que ha sido uno de los mejores, a los cuales he ido. Por ello, espero que el próximo viaje, sea aún mejor que éste.



sábado, 28 de septiembre de 2013

Una gran mujer

Este blog, va dedicado a mi madre, una persona, la cual, admiro mucho desde muy pequeña porque me ha dado amor, confianza y principalmente me ha inculcado que Dios debe ser siempre el eje central de mi vida. Me inspiré para hablar de ella, cuando María Inés, llegó al colegio, al conversar con nosotros los estudiantes de AP Español. Me inspiró, porque dijo que muchos de sus blogs, no hablaba únicamente de ella, sino que ha escrito algunos blogs, sobre personas que son parte importante de su vida. Y mi mamá, es una de las personas más importantes para mí. Ella es más que mi madre; también es mi amiga, compañera, hermana, consejera; en sí, es todo para mí. Ella está conmigo en cualquier momento, muchas veces le ha tocado desempeñar el rol de padre, cuando él, se encuentra ausente. Cuando cometo errores, ella me apoya, y corrige mis faltas de la mejor manera primeramente por medio de la comunicación que siempre ha existido en nuestra familia, porque siempre me ha sabido escuchar. Ella me entiende y siempre me aconseja, porque ella siempre quiere lo mejor para mí.


Cuando ella nació; al principio fue rechazada por su mamá, ya que parece que mi abuelita quería un hijo varón, pero eso no la hizo sentirse despreciada; sino al contrario, luchó por el amor y confianza de su madre. Conforme fue creciendo se dio cuenta que en realidad sus padres la amaban mucho. Su infancia fue en una finca, por lo tanto, no tuvo la dicha de estudiar, ya que la escuela quedaba muy lejos de su casa. Ella, sólo pudo asistir 2 años a la escuela, pero eso no fue impedimento para que no se pudiera desenvolver como una persona culta ante la sociedad en la capital, porque sus padres desde pequeña le habían enseñado buenos principios. Ella no tiene más hermanos, ya que es hija única y  la mayoría de su infancia la pasó sin alguien con quien poder jugar,  pero aun así fue muy feliz.

Su padre la consentía mucho ya que era su princesita. Su madre la trataba con dureza, según decía que, era la forma en que la corregía. Muchas veces ella pensó en irse de su hogar porque su mamá le pegaba injustificadamente  varias veces en el día, siendo aún pequeña. Pero el amor incondicional que le tenía a su padre hizo que nunca abandonara su hogar y quisiera mucho más a su madre, quién luego se dio cuenta que era una bendición tenerla como hija. Su adolescencia, fue muy bonita, aunque algo abrumadora; ya que tuvo que trabajar para ayudar a sus padres, en el corte de algodón. Luego, ese trabajo, fue sustituido a cocinera y lavadora de trastes en el comedor que mi abuelita puso en su casa para poder ayudarse económicamente. El salario de mi abuelito no alcanzaba a pesar que sólo, eran tres miembros en su familia. Vivían de posada en casas de familiares, así que, decidieron venirse a la capital, para poder superar de la crisis que estaban pasando.

A la edad de veinte años conoció a mi padre, se juntaron con el consentimiento de sus padres. Mi papá se la llevó a vivir a casa de mis abuelitos paternos, ella no se negó, porque  su padre siempre le inculcó que la mujer tenía que seguir a su esposo a donde él le indicará que tenía que irse. Aunque les dolió mucho a ellos dejarla ir, pero las cosas así tenían que ser porque los padres nunca son dueños de sus hijos, y ellos cuando son grandes deben tomar sus propias decisiones. Tuvo a mi hermano mayor; el cual, querían mucho y lo consentían mis abuelitos, ya que era el único niño de su familia. Lastimosamente, cuando mi hermano tenía seis años de edad, mi abuelito materno murió de pulmonía. Esto fue muy doloroso para mi madre, ya que la única familia que tenía eran sus padres. Al morir su papá ella se hizo cargo de mi abuelita , la cual , ya  era avanzada de edad. El tiempo transcurrido desde aquel fatal acontecimiento hace ya treinta y un años, actualmente, mi abuelita vive con nosotros. Mi madre siempre vela por el bienestar y cuida a mi abuelita con mucho amor.

Mi mamá me cuenta que sufrió mucho tiempo, porque ella quería otro hijo, el cual, no podía tener. Oró mucho tiempo a Dios, alrededor de veinte años, hasta que Dios me permitió nacer, cuando ella tenía cuarenta y tres años. Cuando ella quedó embarazada los doctores le dijeron que la criatura, iba a ser enferma mentalmente debido a su avanzada edad. Ella llora al contarme esto, dice que soy un milagro y que nací, porque ella le pidió mucho a Dios tener otro hijo. Actualmente, ella es ama de casa, desde que ingresé al colegio, a la edad de 5 años. Es la persona que hasta hoy en día, está conmigo en todos mis desvelos, sin poderme ayudar, porque no tiene ninguna preparación académica. Se levanta media hora antes que yo, lucha conmigo cuando no me quiero levantar y está pendiente de mí en cualquier momento. Me compra cosas sin que se las pida y prefiere darme mis gustos, aunque eso signifique que ella, no compre ropa, ni zapatos para ella misma. Por eso, cuando yo me gradúe primero Dios en junio de Bachiller, será a una de las primeras personas a la que le dedicaré mi logro. Tiene ya, 60 años de edad, pero no solo es una gran madre, sino gran esposa también.

Ella es una persona con buenos principios, amable, respetuosa, amorosa, entregada completamente a Dios y su familia. Es una mujer que siempre ha luchado por sus sueños, nunca se rinde, y ha logrado en la vida todo lo que se ha propuesto, lo cual me ha enseñado siempre. Por esta razón, yo me siento muy orgullosa de ser su hija, porque a pesar de la adversidad nunca se rinde y lucha por sus metas.

Es un orgullo, el que Dios me da; el de poderte llamar "Mamá"

domingo, 22 de septiembre de 2013

PBA más que un grupo, una familia

La experiencia inolvidable de la cual, estoy formando parte, es la de ser estudiante actual de Quinto Bachillerato, con beca en el Colegio Americano de Guatemala, ya que formo parte de este gran grupo, mejor dicho familia (PBA). Todos los que formamos parte de esto, fuimos elegidos por tener capacidades, habilidades o pensamientos que nos hacen diferenciarnos de un estudiante típico. ¿Por qué considero que PBA, es una familia y no un grupo? Porque todos nos llevamos muy bien, y convivimos la mayor parte del día juntos, solo llegamos a nuestras casas a dormir. Además, el ambiente que existe en ambas secciones es de confianza, amistad y buena convivencia. Las dos secciones,  la de cuarto bachillerato y quinto bachillerato 2013-2014, han dejado de ser dos grupos diferentes, para formar un solo grupo, porque la palabra “Unidad” nos define, desde este nuevo ciclo. Los de quinto marcamos la diferencia este año, dándoles un ambiente de seguridad, confianza y amistad, a los chicos de ingresaron este ciclo al programa.

Este último año escolar, ha sido muy emotivo, desde el primer día de clases, pero de eso les hablaré en otra ocasión. Este ciclo ha marcado la diferencia en PBA, desde el primer mes de clases, con la Asamblea de Independencia, que se llevó a cabo el pasado 10 de septiembre en el Auditorio del Colegio,  con nuestra participación, donde entonamos la canción “Orgulloso de ser Chapín”. En dicha asamblea, contamos con la visita de nuestro actual presidente Otto Pérez Molina. También participé, diciendo la jura a nuestra bandera junto con cuatro compañeros más.  Lo cual, fue muy emocionante porque pude observar a nuestro Señor Presidente entre los estudiantes, desde el escenario, repitiendo después de nosotros. Pero ahora les describiré la participación de la gran familia PBA, que puso a muchos a temblar, desde el momento que nos anunciaron que íbamos a tener la oportunidad de participar en dicha actividad.

¿Cómo inició la preparación? Inició sin ninguna idea por parte de PBA, porque no teníamos la oportunidad de reunirnos ambas secciones, además nunca habíamos visto ninguna participación de los becados en alguna actividad, que realiza el colegio. Cuando tuvimos la oportunidad de reunirnos, observé gran cantidad de  ideas que tenían para llevar a cabo en la Asamblea, ya que podíamos realizar lo que deseábamos, pero que tuviera relación  nuestro país.  Nos reunimos un día miércoles, a la hora de almuerzo en un salón, donde por cierto no cabíamos, nos dirigía nuestra maestra de matemáticas. Después de todas las ideas planteadas, cada uno voto por la idea que más le agradó, en lo personal voté por la canción “Mi país” de Ricardo Arjona, pero la que ganó fue “Orgulloso de ser chapín”, por cierto, esta canción nunca la había escuchado. Fue difícil, llegar a un acuerdo, porque todos estábamos hablando y comiendo por ser hora de almuerzo, sin ganas de hacer nada. La idea original, era entonar la canción y entre todos formar la bandera de nuestro país, pero al observar que no íbamos a contar con mucho espacio, decidimos, solo entonar la canción.

Ensayo
Después de haber establecido definitivamente lo que se iba a realizar y teniendo ya el vídeo de la canción, llego lo más difícil de todo, los ensayos. Digo que fue lo más difícil de todo, principalmente para nuestro presidente y vicepresidenta de grado, porque debían controlar a un gran grupo de estudiantes que son totalmente diferentes. Iniciaron los ensayos desde el día jueves en el auditorio, donde todo era un caos cuando las dos secciones se unían. Nuestra maestra de matemática fue la que nos cuidó y nos otorgó sus periodos para ensayar, ese día. El día viernes, ella nos volvió a dar su período, junto con nuestra maestra de inglés, pero los ensayos no mejoraban, por ello, se invitó a otros maestros para que nos dieran su opinión acerca de cómo se veía lo que íbamos a presentar y nos dieran algunas ideas para mejorar. Luego, todo marchaba bien,  hasta que se decidió como nos íbamos a vestir y a calzar ese día, puesto que debíamos salir iguales, la decisión de la nuestra junta directiva no les parecía a muchos. Pero después de tanto discutir se llegó a un acuerdo. Ese día, todos nos quedamos hasta las cinco ensayando puesto que no teníamos prisa de llegar a nuestras casas a hacer tareas. Aunque, no todos se quedaron ensayando, porque algunos de quinto, prefirieron ir a jugar fútbol después de clases, ya que se habían aburrido de tanto ensayo. Las opiniones que nos dieron algunos maestros fueron muy constructivas, que nos ayudaron muchísimo para que el día de lunes que era nuestro último ensayo, lo hiciéramos mejor.

El día lunes, contamos con tres períodos para ensayar, para mí, fue un día muy largo y aburrido, porque nos estuvimos tres horas completamente parados, pero lo que más me gustaba de lo que íbamos a realizar era el baile, que cinco estudiantes iban a sacar antes de la entonación unánime de la canción, donde mi amigo José del Cid, que cariñosamente le decimos “Josecito” se vestiría de Quetzal, porque él es el más bajo de estatura de todo PBA. Pero lo que nos puso nerviosos del día lunes, fue cuando nuestra maestra de matemática, nos informó que teníamos que hacer una presentación anticipada a Mrs. Moreno, directora administrativa de secundaria, para que nos autorizara en definitiva nuestra participación, porque teníamos que hacerlo muy bien, ya que íbamos a contar con nuestro presidente como orador. Algunos estaban contentos, porque pensaban que no íbamos a participar, ya que no querían participar. En lo personal, yo si deseaba que nuestra presentación fuera aprobaba porque nos habíamos esforzado mucho. Y así fue, nuestra participación le pareció muy buena a  Mrs. Moreno. Al final del día, todos estábamos nerviosos y ansiosos, porque nuestra presentación sería al día siguiente.

El día esperado por algunos llegó, nos reunimos desde las siete y media de la mañana para terminar de afinar algunos detalles. La asamblea daría inicio a las ocho treinta y cinco. Observé por la ventana cuando el vehículo donde se transportaba el Señor presidente ingresó al colegio, lo que fue muy emocionante. Luego, observé cuando empezaron a ingresar los estudiantes al auditorio y fue cuando mis nervios aumentaron. Dio inicio la asamblea, participé diciendo la jura a nuestra bandera y gracias a Dios nos salió muy bien. Después, escuchamos las palabras que el Señor presidente tenía para nosotros, donde motivó en gran manera, a poner en práctica nuestros valores. Lastimosamente, por la cargada agenda que tienen los mandatarios, nuestro Presidente, tuvo que retirarse antes, y no presenció nuestra presentación, ya que nuestra participación era la última.

Nuestro momento de participar comenzó, la mayoría estábamos nerviosos porque no sabíamos cuál sería la reacción del público, sin en realidad les agradaría o no. Aunque no pude presenciar muy bien el baile, porque los que no participaríamos en él, teníamos que estar afuera del auditorio e ingresaríamos hasta que el baile terminara. Cuando ingresamos, mis nervios se fueron y la emoción de estar ante todos los maestros y estudiantes  de  secundaria, fue increíble. Pude ver,  que conforme fuimos cantando, conmovimos los corazones de algunos maestros y estudiantes que no son guatemaltecos, a los que los hicimos sentir parte de nuestro bello país. En ese momento, todos pusimos nuestro corazón en la canción y pudimos transmitir realmente el mensaje que deseamos, porque yo estoy muy orgullosa de ser chapina. Durante esta presentación vi, talentos de canto presentes en algunas estudiantes de primer año de PBA, y el talento de algunos chicos para cantar rap. Fue tan especial nuestra participación, que los maestros y estudiantes nos aplaudían, cosa que no esperábamos. Algunos alumnos se levantaron de sus asientos y cantaron junto con nosotros, otros tomaron fotografías y vídeo.

Al finalizar la asamblea, muchos maestros y estudiantes, se nos acercaban para felicitarnos, porque nunca esperaron una participación tan agradable, por parte de la familia PBA. El recuerdo que tenemos de esta presentación, es la fotografía que nos tomaron a las dos secciones unidas, donde todos aparecemos como una familia, porque en realidad eso somos. Pero, el recuerdo más bonito, es el que llevó en mi mente y corazón, porque agradezco a Dios que todo nos salió muy bien y ahora somos conocidos en toda secundaria. Espero tener otras experiencias tan significativas como estas, donde podamos seguir demostrando a los demás que realmente PBA es una familia y no un grupo.





lunes, 16 de septiembre de 2013

Mi ejemplar de esfuerzo, mi padre


Al leer el blog de María Inés, me llamó mucho la atención, el que escribió a cerca de la buena relación entre ella y su padre. Me sentí identificada con este blog, porque mi padre y yo, tenemos una buena relación, ya que soy su única hija, mujer y por lo tanto me consiente mucho. Desde antes de nacer, mi padre deseaba tener una hija, porque ya tenían a mi hermano. Fue mucho el tiempo, que transcurrió, para que yo pudiera nacer, debido a que mi madre no pudo tener hijos durante un largo tiempo. Nací, cuando mi padre tenía ya, 47 años de edad, él me recibió con mucho amor, porque sintió que su sueño de tener una niña se había cumplido. Aunque todos en mi familia deseaban que yo hubiese tenido los ojos azules y de tez blanca, como él, pero no fue así, muchos dicen que me parezco más a mi madre. El día de mi nacimiento, mi padre tenía que salir en la noche al Puerto de San José a dejar Cardamomo, en el tráiler que él manejaba, pero debido a la noticia, de que ya iba a nacer, ya no salió de viaje. El señor que fue en lugar de mi padre, al Puerto, lo asaltaron y lo mataron ese día, pero gracias a mi nacimiento mi padre se libró de morir.

El nombre Ruth, lo eligió mi padre, porque es el nombre de un libro de la Biblia, donde se menciona a una mujer luchadora, que salió adelante por voluntad propia, y también este nombre significa, sensible y compañera fiel, cabe mencionar que mi familia es cristiana evangélica. Mi padre durante gran parte de mi infancia, era conductor de un tráiler, y mi mamá tenía un negocio propio, pequeño. Debido al trabajo de mi padre, él tenía que viajar mucho al interior del país, algo que era muy emocionante para mí, y a la vez triste. Era emocionante, porque a veces nos llevaba a mi madre y a mí, de viaje en el tráiler y conocíamos muchos lugares juntos, en familia. Era triste también, porque él pasaba muchos días lejos de nosotros, una vez tardó quince días de viaje. En una ocasión, mi padre quería que yo conociera el Puerto Santo Tomás de Castilla, pero no nos dejaban ingresar a mi madre y a mí en el área de carga de contenedores, así, que nos escondimos en el camarote del tráiler. Aunque no solo viajábamos juntos en familia en el tráiler, sino que también por medio, de nuestro vehículo.

Desde que yo tengo uso de razón, mi padre ha trabajado, sin descansar, para brindarnos todo lo que necesitamos en mi hogar, mencionando, que el también mantiene económicamente a mi abuelita materna, que desde hace treinta años que vive en nuestro hogar, el tiempo que tiene mi abuelo, su esposo, de haber fallecido, razón por la cual no lo conocí. Mi papá es un ser magnifico  para mí, porque es luchador, paciente, respetuoso, amigable y tiene coraje para seguir adelante, sin importar el sacrificio que tenga que hacer, para mantener nuestro bienestar como familia. Él es el segundo hijo de 7 hermanos, es originario de Retalhuleu, pero por la falta de dinero en su casa cuando era pequeño, vino muy joven a la ciudad capital, en busca de trabajo, para colaborar en su hogar.

Un acontecimiento, que me ayudo a formarme como persona, fue el accidente que tuvo mi padre hace seis años, porque me ayudó a valorarlo más. Y comprender, que nuestros padres, son las personas más importantes de nuestra vida. En sí, no solo a valorarlo a él, sino a todas las personas, y que la amistad  no sólo,  está presente en los buenos momentos, ya que mi padre estuvo a punto de morir, pero en el tiempo de su recuperación conocimos a nuestros verdaderos amigos, quienes eran los  únicos que lo iban a visitar. El espíritu de valentía y coraje lo adquirí en este acontecimiento, porque mi papá, dio todo de su parte para que su recuperación no fuera tan larga  y poder regresar a trabajar pronto. A pesar de eso, su recuperación duró 3 años. El perdón, también fue algo que adquirí en ese tiempo, porque mi padre perdonó a la persona que lo atropelló a pesar de haberle causado una fractura en la tibia y el peroné en ambas piernas, por el simple hecho de conducir en estado de ebriedad. Ahora, todo lo que sufrí al lado de mi familia durante este largo tiempo, me ayudan a ser una mejor persona.

Durante toda mi vida, mi padre ha sido una parte fundamental de mi vida, porque sabe cómo darme palabras de aliento, cuando siento que ya no puedo más. Sé que él me ama mucho, me respeta y consiente en todos los caprichos que tengo. Ahora, él tiene 64 años de edad, ya no desea trabajar,  desde que sufrió el accidente, pero lo sigue haciendo, porque dice que tiene  que sacarme adelante a mí, hasta donde las fuerzas le alcancen. Es por eso, que me esfuerzo cada día, con la ayuda de Dios para no defraudarlo y que en un futuro muy próximo se sienta orgulloso de mí. Y pueda pagarle todo lo que hasta el momento, él se ha sacrificado y pueda brindarle todas las comodidades que se merece, porque me siento orgullosa de ser su hija, ya que para mí, él es el mejor papá del mundo y yo para él soy su mayor tesoro en ésta vida.